miércoles, 11 de septiembre de 2013

Desmentido sobre campaña falsa usando el nombre de Arocena

Por esta vía estamos desmintiendo que se este realizando alguna campaña apoyando a los cinco espías castristas, 4 de ellos aun presos en Estados Unidos o equiparando su caso con el del contratista Alan Gross encarcelado por el dictador de Cuba, tal como anda circulando por las redes sociales en un mensaje totalmente falso, de la autoria de Julio Soto Angurel.

Eduardo Arocena no aceptaría jamas y menos luego de cumplir 30 años de prisión ser canjeado por los espías del régimen cubano, pese a su larga condena, su delicado estado de salud, su edad avanzada, su dignidad se mantiene intacta, por lo que rechazamos este tipo de manipulación usando su nombre para tan oscuros fines.

La pasada campaña oficial que estuvo vigente recientemente fue la recogida de firmas, que se hizo con la intención de hacerle una petición al director de prisiones, cuyas firmas ya fueron enviadas y aguardan por una respuesta oficial y la próxima campaña en caso de una nueva negativa a esta petición sera para recoger fondos para gastos de abogado, ya que Eduardo Arocena ha recibido muy recientemente confirmación de que su caso estuvo plagado de errores y que hay una ventana de oportunidad para que su sentencia sea revisada en un nuevo juicio, para ello contamos con la ayuda de sus amigos de siempre y amigos de la causa cubana para que den su aporte con cheque o money order a nombre de Eduardo Arocena y enviar a Miriam Arocena al P.O.Box 831451, Miami, FL 33183.

Estamos cansados de tener que estar desmintiendo campañas oportunistas que pretenden usar a Arocena como bandera de agendas ocultas de algunos que se llaman opositores a Castro, por tanto le solicitamos a los lectores que se hagan eco de estas afirmaciones para que quede en claro que Arocena no se rinde ni se vende, ni quiere pactos con el tirano ni verse mezclado a actividades del gobierno de Estados Unidos.

Gracias repetidas a los ángeles de a pie y a toda buena persona que desea apoyar a Eduardo Arocena a cumplir su sueño de regresar con vida a casa.